El sistema de detección de incendios convencional es aquel cuyos elementos (detectores, pulsadores, etc) se agrupan por zonas. Cuando una zona de detección entra en alarma, se produce el aviso acústico y luminoso a través de los dispositivos de alarma: sirenas, focos, indicadores, etc.
Este tipo de instalaciones de detección de incendios son las más comunes en pequeños locales o aparcamientos ya que, debido a las pequeñas dimensiones del local o el carácter diáfano del mismo, no es difícil la localización del elemento en alarma, aunque la centralita de control nos indique únicamente la zona donde se produce la alarma y cada una de estas zonas alberge un número relativamente alto de detectores.
Las instalaciones de detección de incendios convencionales son concebidas para una máxima duración y un sencillo mantenimiento.